En
Solidaridad
Como
bastión priista únicamente en elecciones locales (referente histórico) el
Revolucionario Institucional siempre ha ganado a pesar de postular delincuentes
a la presidencia municipal como es el caso de Filiberto Martínez, quien incluso
está vinculado hasta en el delito de secuestro, y que hoy, gracias a la mafia
política de Pedro Joaquín y su medio hermano Carlos Joaquín que lo solapan, es
nuevamente candidato a la diputación local del distrito cinco que está dividido
territorialmente en los municipios de Solidaridad y Tulum. Sólo basta recordar
que en las elecciones federales pasadas, los solidarenses le cobraron en las
urnas la derrota de Enrique Peña Nieto, Félix González y Román Quian,
perdedores ante el PRD en las postulaciones de presidente de México, senador y
diputado federal, respectivamente. Hoy, ese fantasma está presente en este
proceso electoral.
Pero
además de Filiberto Martínez cuya antonomasia es la de criminal en las
especialidades de represor, corrupto, extorsionador y delincuente electoral,
otra inconformidad del PRI es la conformación de sus planillas de síndico y
regidores, y Solidaridad no fue la excepción.
¿Por
qué es tan sensible la planilla? El voto duro del PRI en Solidaridad es
sistemático, es decir, si hoy el candidato a la presidencia municipal de
Solidaridad fuera Juan Pérez, existiría, cuando menos, el mismo ánimo que con
Mauricio Góngora. Esto sucede porque no existen liderazgos personales capaces
de fracturar al Revolucionario Institucional si un inconforme brincara a otro
partido político, como sucedió en Cozumel con Gustavo Ortega, a quien no le pareció
la candidatura de Javier Cetina, y saltó al PAN para derrotar en las ánforas al
PRI. Esa situación no existe en Solidaridad. Las estructuras del Revolucionario
Institucional están conformadas por mujeres y hombres que no aspiran a la
presidencia municipal, ¡pero atención! Sí aspiran cada trienio a una regiduría.
La
palabra mágica “regiduría” es el motor que mueve los liderazgos del PRI; y
cuando no les toca esa posición suelen haber “heridos” y peor aún cuando
sienten que la “revolución no les hizo justicia” y la preciada candidatura a
regidor cayó en una persona que, desde la óptica de ellos, no merece tal
designación.
Cuando
sucede así, el PRI queda lastimado con una “hemorragia” interna que no suele
ser visible al ciudadano ajeno a la política de partidos, pero que puede causar
problemas severos para el buen funcionamiento de la llamada “maquinaria”
priista. Es cuando suele haber la “huelga de brazos caídos”.
Las
2 principales inconformidades en la integración de la planilla de Solidaridad
son las de Graciela Falcón y Maricruz Escudero, ambas propietarias, y las dos
rechazadas rigurosamente por la militancia priista de Solidaridad.
En
Tulum
El
“proceso cicatriz” pareciera piel de iguana. Hace una semana, aproximadamente,
cuando se dio a conocer “discretamente” la planilla, hubo reacciones muy fuertes
y el PRI entró en cierta crisis. Las inconformidades marcadas fueron por Fanny
Gallegos, Lenny Dzul y Anahí Mendoza. La primera fémina en cuestión por no ser
considerada priista; la segunda, por
falta de méritos; y la tercera por tener el “gran” mérito de ser sobrina de una
criminal. Aunado a esto, estaban los bandazos de Jorge Portilla, un aspirante
inconforme por no ser el ungido a la candidatura por la presidencia municipal.
Pero a diferencia de Solidaridad, en Tulum sí existen liderazgos personales
capaces de causar un boquete al PRI en caso de una disidencia, como Marciano
Dzul, Víctor Maas o Gilberto Gómez.
A
pesar de que el perredismo en Tulum está avanzando con pasos muy largos, los
priistas antes mencionados son doctrinarios o mejor conocidos como
institucionales, que su vida política es por el PRI y para el PRI, con
excepción del candidato a la presidencia municipal por el PRD Armando Ventre, a
quien conocí priista y ahora está en las filas opositoras, quizá por influencia
familiar emanada de sus hijos como Alonso Ventre, actual regidor que según el
tribunal electoral perdió frente a Edith Mendoza por menos de 200 votos.
Esa
tentación de brincar a otro partido competitivo como el PRD no es para nada
exclusiva de Armando Ventre. También la tuvo Juan Carlos Medina, quien posee un
importante liderazgo electoral en Tulum. Abandonó las filas priistas pero
decepcionado del Partido de la Revolución Democrática regresó al PRI.
El
PRI de Tulum a diferencia de Solidaridad tiene operadores políticos. Fue
precisamente Gilberto Gómez, conocido como “El Chino” quien hoy es el “bombero”
encargado de apagar los “fuegos” de Tulum. Hoy Juan Carlos Medina, mejor
conocido como “El Taralacas” recapacitó de su exabrupto político y su reingreso
a las filas del PRI contribuye para que las aguas empiecen a calmarse.
En
la medida en que los empresarios y las bases trabajadoras del Revolucionario
Institucional limen asperezas, David Balam enfrentará una elección sin mayores
problemas para refrendar a su partido en la presidencia municipal. La ventaja
adicional que tiene con respecto a Solidaridad es que el presidente municipal
subsanó todas las torpezas y agravios que sufrió el pueblo de Tulum con la
represora, corrupta y criminal de Edith Mendoza. Pero la cereza en el pastel es
que hoy, esa delincuente, que es cuota de la mafia Joaquín, principalmente del
medio hermano de Pedro Joaquín, Carlos, está en la cárcel. Esta acción le
traerá positivos al PRI en la votación del próximo 7 julio.
En
Cozumel
A
una horas de iniciar las campañas, los números preliminares indican que la
contienda estará entre el candidato del PRI Freddy Marrufo y César Trejo del
Partido Movimiento Ciudadano.
Amén
que César Trejo es tan o más conocido que Freddy Marrufo en Cozumel, el
candidato de Movimiento Ciudadano debe agradecerle a Aurelio Joaquín sus altas
posibilidades de hacer un gran papel en las urnas. Los desaciertos de “Lito”
como su desorden financiero, de seguridad pública y caos político ya generaron
un hartazgo en los cozumeleños que podría perjudicar a Freddy Marrufo y
beneficiar enormemente a César Trejo.
Un
ejemplo: por si todo esto fuera poco, “Lito” ocasionó una confrontación
innecesaria al interior del PRI al impulsar por sus lentes a la esposa de
Carlos Hernández, Adriana Teissier a la diputación local por el sexto distrito,
cuando la opción para esa candidatura era y fue Lilia Mendoza. Esta situación
será otra coyuntura que abonaría a favor de César Trejo, es decir, votos de
castigo al PRI a favor de una oposición con posibilidad de triunfo.
Pero
además de todo esto, esos mismos números indican que Freddy Marrufo llegó a su
techo. Esto quiere decir que el candidato del PRI tendrá que administrar su
ventaja porque ya no crecerá más, pero sí podría descender. En contraparte
César Trejo continúa creciendo y sin el efecto negativo del descalabro de la
alianza PAN-PRD.
El
golpe certero
La
“operación” de alto nivel, esa de cúpula, ya hirió de muerte al PRD y al PAN en
la mayor parte de la geografía de Quintana Roo. Un ejemplo, en Solidaridad no
se inscribió ninguna planilla de Acción Nacional, es decir, no participará en
la próxima elección; y la planilla de facto que configuró el Partido de la
Revolución Democrática con candidatos de afiliación panista podría sucumbir
ante la protesta de perredista que se inscribieron aludiendo la autonomía
estatutaria del partido del Sol Azteca. Como se observa, es todo un caos para
la oposición al PRI, cuyos autores deben estar festejando el golpe magistral y
bien medido para conservar el poder mediante la legalidad, sin amenazas, sin
represión, sin perjudicar más que las buenas intenciones no realizadas por la
gran ignorancia en términos electorales de los panistas y perredistas.
En
Solidaridad, Orlando Muñoz se veía con ciertas posibilidades de hacer un buen
papel con esta emulsión de izquierda y derecha, pero en caso de ser aceptada su
planilla de facto, aún por el PRD y sin PAN será sin duda el segundo lugar,
pero sin mayores posibilidades de ganar a pesar de la hemorragia interna del
PRI.
Lo
mismo para Tulum, Armando Ventre se percibía como una amenaza importante para
David Balam, pero ahora, sin el PAN, llegará al Cabildo como regidor,
sustituirá a su hijo Alonso y se acabó. ¡Claro! Siempre y cuando no suceda algo
extraordinario.
Y
en el caso de Cozumel, este golpe fue al aire, porque el PAN está mermado y el
PRD prácticamente no existe. El único opositor con posibilidades reales de
hacer algo importante en la isla de las golondrinas es César Trejo, que por ser
candidato de Movimiento Ciudadano es indiferente a los problemas de la
coalición PAN-PRD.
En
resumen, el Talón de Aquiles del PRI son sus planillas, y sin una alianza
opositora, todo terminará por recibir un fuerte golpe en su talón, que si bien
es doloroso, no será en su cabeza.
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